Un poco más tarde que en Mesopotamia, en el extremo occidental de la Media Luna Fértil, nació la civilización egipcia, una de las más importantes y duraderas de la Antigüedad. Su historia abarcó más de tres mil años.
Cuando el historiador griego Heródoto visitó Egipto,comparó la prosperidad de ese país con la pobreza de su tierra natal. Se preguntó cómo podía ser si estaba rodeado de desiertos. Más tarde se dio cuenta de que se debía a las crecidas periódicas del río. Por eso afirmó que Egipto era un don del Nilo.
Egipto está bordeado por el desierto de Arabia al oeste y por grandes canteras de piedra al este. En esta tierra tan poco hospitalaria, el río se desborda cada año, en la misma época, gracias a las lluvias de primavera sobre sus fuentes de origen en el lago Victoria. El Nilo corre de sur a norte. En su curso superior está encajonado entre alturas, formando saltos o cataratas; esta zona se conoce como Alto Egipto y es un valle angosto, donde el lecho del río es profundo. La fuerza de la corriente va arrastrando a su paso algas y tierra, aumentando progresivamente el caudal. A medida que avanza hacia las tierras bajas, conocidas como Bajo Egipto, su caudal se hace incontrolable. Cerca de la desembocadura lleva ¡más de 110 millones de toneladas de sedimento! Este sedimento es un excelente abono natural que se deposita en las orillas cuando baja la inundación.
Sin embargo, la civilización egipcia no fue el resultado de un fenómeno natural como la crecida de un río, sino lo que los hombres lograron hacer con ella. Sin el trabajo humano, el desborde del Nilo hubiera beneficiado a una franja de poco más de 20 km de ancho y en el delta, donde la llanura inundable alcanzaba 250 km de ancho, se hubiera formado un pantano intransitable. Al igual que en Mesopotamia, fue la organización del trabajo colectivo lo que permitió aprovechar al máximo la inundación. Egipto contaba con ventajas frente a Mesopotamia. La crecida del Nilo era previsible y ocurría en una época óptima del año, después de que el grano fuera cosechado. De este modo, irrigaba la tierra y el limo abonaba el suelo para la nueva siembra. Muy pronto, algunas personas advirtieron el momento justo en que empezaba la inundación. Coincidía con la aparición de la estrella Sirio en el horizonte, poco antes del amanecer. Esto permitía prever, con tiempo suficiente, la construcción de canales y diques para conducir la crecida, así como de los embalses donde se depositaría el exceso de agua, para ser usada luego como reserva, o llevada, por nuevos diques y canales, hacia regiones más lejanas.
Responder las siguientes preguntas a partir de la lectura:
¿En qué espacios geográficos ubicamos a esta civilización?
¿Por qué afirmaba Heródoto que Egipto era “un don del Nilo”?
Enumerar todas las tareas que realizaban los egipcios para aprovechar la crecida del río Nilo.
El río Nilo definia las estaciones y el trabajo de los egipcios. En la segunda quincena de junio, los nilómetros instalados en el curso superior del río anticipaban el volumen de la inundación. No todas eran iguales: se estima que solo tres de cada diez crecidas eran adecuadas. Las restantes eran excesivas o insuficientes. Luego de la primeras lluvias de junio -que daban comienzo a la estación de la inundación llegaban las grandes aguas, entre mediados de agosto y principios de octubre. Durante ese tiempo, mientras el río desbordado era parcialmente conducido por diques y canales para irrigar mayor superficie de tierra, los campesinos se dedicaban a tareas encomendadas por el faraón. Entre ellas, la construcción de templos y pirámides. Cuando bajaban las aguas, con el suelo abonado por el limo, comenzaba la estación de siembra. Una vez terminada, los hombres volvían al trabajo forzoso en otras actividades. De noviembre a marzo se organizaba la extracción de piedra en los acantilados occidentales; bloques inmensos se trasladaban en barcazas a través del Nilo hasta los sitios donde se realizaban las grandes construcciones religiosas y funerarias. En marzo se iniciaba la estación de la cosecha. Se recogían y se guardaban el trigo y la cebada -principales producciones egipcias- bajo la vigilancia de los funcionarios del faraón. En poco más de dos meses, antes de la siguiente crecida, los campesinos procedían a reparar los diques, los canales y los embalses.
Además de trigo y cebada, los egipcios plontaban, para el consumo, cebollas, ajos y lechugas. El pan y la cerveza, junto a estas hortalizas, eran la base de la dieta egipcia, que a veces se completaba con moluscos y peces. El vino era una bebida que consumían solo los ricos. La principal planta textil cultivada era el lino, con el que tejian las telas para sus vestidos y hacían las vendas con las que envolvían las momias. Criaban cabras, cerdos, ovejas, adenás de bueyes y asnos para la carga. Los más ricos comían aves o ciervos que cazaban en los pantanos del delta.
En teoría, la tierra pertenecía al faraón, que era un dios, pero a veces el faraón donaba tierras, o su usufructo, a nobles, generales o sacerdotes. El foraón explotaba algunas tierras en forma directa, que eran trabajadas por los campesinos, o arrendaba parcelas a funcionarios, soldados o campesinos a cambio de servicios y tributos. También los dueños de la tierra poseían esclavos que realizaban distintas labores sin ningún tipo de beneficios. Los templos eran beneficiarios de estas donaciones, en las que se incluía a los trabojadores. Muchos de los modos de irrigación se conservaron en el Egipto profundo hasta hace muy poco tiempo. Pintura de una tumba del siglo XIV a. C. que muestra los trabajos en el campo.
Haz tabla con tres columnas, una que se llame "mes del año" y otra que se denomine "estación", y la última "actividades desarrolladas". A partir del texto, anotarás qué tareas se realizaban según el momento del año correspondiente. También puedes hacer una línea de tiempo y ubicar en ella los mismos datos.
A partir del texto "¿A quién pertenecía la ierra en Egipto?", construye una Pirámide social y ubica en ella los grupos que se mencionan, comenzando por el Faraón (parte más alta), y culminando con los Esclavos.
Ejemplo de tabla.
En pocos pueblos de la Antigüedad la religión cumplió un papel tan central como en Egipto. A lo largo de tres milenios, multitud de dioses poblaron el panteón del país del Nilo. Si bien hubo dioses de mayor y menor importancia, es imposible armar una jerarquía o siquiera un orden, pues estas divinidades provenían de diversas tradiciones fusionadas. El politeísmo egipcio fue sincrético.
Desde la época predinástica se divinizaron fuerzas y formas naturales. Algunas divinidades tenían forma animal -como Horus, el halcón y habrían cumplido funciones totémicas. Otras eran antropomorfas y las había híbridas, mitad humanas y mitad animales. Muchos dioses se impusieron sobre los demás gracias a la hegemonía política que adquirió su ciudad; así sucedió con Ra, el sol, con la pri macía de Heliópolis, o con Amón, durante el largo predominio de los reyes tebanos. Otras divinidades, como Osiris, antecedieron a las dinastías y sobrevivieron a varios períodos políticos.
Para leer un poco más
El mito de Isis y Osiris. Mucho tiempo atrás, antes de que los faraones gobernaran Egipto, Osiris era un gran rey que había enseñado a su pueblo a respetar las leyes, cultivar la tierra y extraer metales del suelo. Tenía un hermano muy envidioso, llamado Seth, quien logró que Osiris entrase en un cofre de madera creyendo que era un juego. Seth cerró el cofre y lo arrojó al Nilo. Cuando la esposa de Osiris, Isis, se enteró, comenzó a buscarlo desesperadamente, pero Seth se adelantó, recuperó el cuerpo y lo cortó en pedazos. Isis continuó la búsqueda; halló todos los restos dispersos y lloró sobre ellos, ocasionando con su llanto la crecida del Nilo. Después, con la ayuda de los dioses Thot y Anubis, momificó el cuerpo de Osiris y lo resucitó. Osiris volvió a ser rey, pero no de los vivos sino de los muertos. Horus, el hijo de Osiris, decidió vengar a su padre y se enfrentó a Seth. Cansados de tanta violencia, los dioses celebraron un juicio y dieron la razón a Osiris y a Horus. Osiris recuperó su trono en la tierra pero se lo cedió a su hijo. De él descendió el primer faraón egipcio.
Uno de los rasgos más originales de la religión egipcia fue el modo en que representó la vida de ultratumba. Al principio se creía que solo el faraón tenía ese privilegio, pero más tarde este se amplió. Se creía que al momento de morir el difunto era sometido a un juicio presidido por Osiris, en el que se juzgaba su conducta terrena, aunque sin exigencias morales, pues el recitado de una fórmula mágica exoneraba al muerto de sus culpas.
Creían que para vivir después de la muerte la condición principal era mantener el cuerpo incorrupto, lo que los llevó a practicar el difícil arte de la momificación. Por si esta fallaba o el cuerpo era robado, se colocaban varias estatuas en la tumba, como si fueran dobles del difunto, donde este podía alojarse para no morir.
Los muertos eran enterrados con sus pertenencias y, a veces, con sus sirvientes. Si se trataba del faraón, la tumba se proveía de pasadizos y cámaras secretas para despistar a los posibles ladrones.
"El juicio de los muertos"
El arte egipcio muestra la influencia de la religión y generalmente está supeditado al poder político. El ejemplo más claro de esta triple alianza de arte, religión y poder son las pirámides Los monumentos colosales que nos ha legado Egipto son las tumbas de los faraones. Aparte de la pirámide real, se construía en su entorno un complejo funerario constituido por templos rampas y tumbas menores.
Apenas coronado, el mismo faraón comenzaba la construcción de su tumba, pues el mayor peligro era morir sin poder ser enterrado. En torno a la tumba del faraón se encontraban las de sus familiares más cercanos-esposa e hijos-, además de un templo para rendirle culto y en ocasiones hasta un puerto para que el rey pudiera acompañar al sol en su travesía.
En el interior de las pirámides había corredores que llevaban a la cámara funeraria donde se depositaba el sarcófago. Luego se sellaba la entrada de las pirámides con piedras. Había también pasadizos secretos y puertas falsas para despistar a los profanadores de tumbas.
ACTIVIDAD
1) Resuelve el siguiente cuestionario: https://forms.gle/Zh334p9tvd19Gre87
2) ¿Qué nos muestra la imagen de "El juicio de los muertos"?